domingo, 16 de octubre de 2011

Búnker alemán - 2GM

Como ya hemos comentado en el 'paso a paso' del oficial del heer, lo primero es preparar el terreno para el búnker, tapando con cinta de pintor las partes que no queramos que se queden cubiertas de tierra, aplicamos una cola en spray especial para materiales sintéticos.


Acto seguido lo cubrimos por completo con la tierra que hará de base. Aquí utilizo una mezcla que tengo preparada desde hace bastante tiempo, pero en cualquier tienda podemos conseguirla fácilmente. También, como diría alguno que yo me sé - 'seguro que al lado de casa tienes una obra' - esa tierra también sirve.



Dándole un tiempo, 10 - 15 minutos, procedemos a retirar la tierra sobrante y la cinta de pintor que cubría las partes que queríamos mantener al descubierto.



Repetimos la jugada con el techo del búnker, ya que en este kit de montaje está pensado para que también sea de tierra.



Ahora es cuando nos ponemos con el búnker en si mismo, mientras dejamos que la tierra termine de secarse bien en la base y en el techo. 
Lo primero que haremos será dar una capa de imprimación negra, para luego, con pintura blanca, ir aclarando con la técnica del pincel seco hasta conseguir lo más parecido al cemento/ hormigón. Lleva su tiempo, pero se consigue un efecto más que aceptable.




Una vez pegado el búnker a la base, podemos ir añadiendo pequeños detalles de escenografía, como los sacos terreros, y con una base de césped, ir retocando las partes que han quedado peor.


Cuando ya nos queda más o menos como queremos, podemos seguir añadiendo esos pequeños detalles que le darán algo más de vidilla. En este caso yo he optado por un par de defensas anti carro y un pequeño carromato cargado con cajas de munición y bidones de combustible.



En el interior del búnker, hacemos la distribución de tropas. En este caso he optado por poner un poco de variedad en armamento.



Tan sólo nos queda colocar el resto de las miniaturas donde mejor nos parezca, como no las dejo fijas, da para mucho juego.






Como también puede verse, al final vas añadiendo algunas cosas más, sobre todo para ir tapando los pequeños defectos que han podido quedar.

Y de este modo, ya tenemos listo el búnker.

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